Crenosoma vulpis es una especie de gusanoLarva de Crenosoma vulpis. Imagen tomada de www2.vet-lyon.fr redondo (nematodo), parásito de las vías respiratorias de perros y otros cánidos salvajes (p. ej. zorros, lobos, etc.) que afecta también muy ocasionalmente a los gatos. También se encuentran a menudo en erizos, conocidos predadores de caracoles.

Se da fundamentalmente en el hemisferio Norte, en Europa, Norteamérica y Asia, con incidencia variable según las regiones. Estudios en Alemania mostraron que cerca del 1% de los perros investigados estaban infectados con este parásito, y cerca del 3% en Canadá. En la costa atlántica de Canadá se observó que más del 50% de los zorros estaban infectados con este parásito, y en Dinamarca hasta el 17%.

La enfermedad causada por las infecciones con este nematodo se conoce como crenosomiasis.

Este parásito no afecta al ganado (bovinos, ovinos, caprinos, porcinos), ni a caballos, ni a aves domésticas

Los perros infestados con Crenosoma vulpis ¿son contagiosos para seres humanos

  • No. No hay ninguna evidencia de que estos gusanos infecten a seres humanos. Se trata de nematodos específicos de los cánidos.

Localización de Crenosoma vulpis

Los órganos predilectos de Crenosoma vulpis son los bronquios y bronquiolos, a menudo también la traquea.


Descripción de Crenosoma vulpis

Los adultos de Crenosoma vulpis alcanzan unos 15 mm de longitud, son de color marrón parduzco y, en su parte anterior, la cutícula muestra unos pliegues o muescas dentadas que recuerdan algo a la forma de los equisetos.

Los huevos eclosionan ya en las vías respiratorias del hospedador, por lo que en las heces se encuentran sólo jóvenes larvas, no huevos.


Biología y ciclo vital de Crenosoma vulpis

Caracol común (Helix spp). Imagen tomada de Wikipedia Commons

 Crenosoma vulpis tiene un ciclo de vida indirecto, con limacos (babosas) y caracoles como hospedadores intermediarios.

Las hembras adultas en los bronquios o tráquea del hospedador depositan los huevos que se desarrollan a larvas L1 ya en las vías respiratorias y comienzan a emigrar hacia la boca. Mediante toses, estornudos o expectoraciones llegan a la boca y de allí al sistema digestivo y finalmente con las heces al exterior.

Las larvas penetran activamente en un limaco o caracol, en el que se desarrollan a larvas L3. Estas larvas serán a su vez ingeridas por u perro u otro hospedador final al ingerir éste un caracol infectado. Al parecer no hay hospedadores de transporte (paraténicos) involucrados en el ciclo. En el perro, las larvas ingeridas con la presa contaminada alcanzan el intestino, atraviesan la pared estomacal o intestinal y, a través del flujo sanguíneo, llegan a los pulmones en unas 3 semanas. Allí completan el desarrollo a adultos y empiezan a poner huevos. En el perro los adultos pueden vivir unos 10 meses.

Si no está familiarizado con la biología general de los helmintos y de los nematodos parásitos pulse aquí para consultar los artículos correspondientes en este sitio.


Daño, síntomas y diagnóstico de Crenosoma vulpis

Las infecciones con Crenosoma vulpis pueden producir tos crónica y parecerse a una bronquitis alérgica de mayor o menor intensidad, segun el nivel de infección. Aunque pueden ser graves, no son fatales.

El diagnóstico se confirma por la presencia de las larvas de unas 300 micras en las heces, pero sólo con el método de Baermann. O bien mediante detección de las larvas en exudados respiratorios, si bien este método puede producir más falsos negativos que el de Baermann.

No se dan infecciones de seres humanos con Crenosoma vulpis.


Prevención y control de Crenosoma vulpis

En zonas endémicas, será conveniente evitar que los perros tengan acceso a limacos o caracoles infectados, aunque esto puede ser muy difícil de lograr, sobre todo en zonas rurales y para perros de caza.

Por ahora no hay vacunas que protejan a los perros haciéndolos inmunes a este parásito. Por ahora no hay tampoco métodos de control biológico de este parásito mediante sus enemigos naturales.

Antiparasitarios químicos

Pocos desparasitantes incluyen esta especie entre sus indicaciones, entre ellos productos con emodepsida, milbemicina oxima y moxidectina. También hay reportes de eficacia con febantel, fenbendazol e ivermectina.

Puede interesarle el artículo en este sitio sobre plantas y remedios vegetales antihelmínticos (enlace).

Consulte a un médico veterinario para obtener informaciones y recomendaciones más precisas adaptadas a las condiciones climáticas y epidemiológicas regionales.


Resistencia de Crenosoma vulpis a los antiparasitarios

Por ahora no hay reportes de resistencia de Crenosoma vulpis a los antihelmínticos de uso habitual.

Esto significa que si un producto no procura la eficacia esperada contra estos parásitos, lo más probable es que no se debe a un problema de resistencia, sino a uso incorrecto o a que el antiparasitario empleado no es adecuado para dicho control. El uso incorrecto es la causa más frecuente del fracaso de productos antiparasitarios.

Aprenda más sobre qué es la resistencia y cómo manejarla.