Mecistocirrus digitatus es una especie de gusanos redondos (nematodos), parásito intestinal de bovinos, ovinos, caprinos, porcinos. Está extendido por América Central y del Sur, África y Asia, y a menudo infecta al ganado en infecciones mixtas con otros helmintos gastrointestinales.

No afecta a perros, gatos, caballos ni aves. Hay al parecer casos muy excepcionales de infecciones humanas.


Hembra adulta de Mecistocirrus digitatus. © J. Kaufmann / Birkhäuser Verlag

Localización de Mecistocirrus

El órgano predilecto es el estómago (cuajar) rara vez se les encuentra en el intestino delgado.


Descripción de Mecistocirrus

Los adultos de M. digitatus son similares a Haemonchus y alcanzan de 3 a 4 cm de longitud; los machos son más cortos que las hembras. En las hembras, los ovarios también se enrollan alrededor del intestino y la apertura genital de la hembra está situada cerca del ano, pero carece de lengüeta. El cuerpo tiene unas 30 estrías longitudinales. Los huevos tienen un diámetro de unas 70 x 110 micras.


Biología y ciclo vital de Mecistocirrus

M. digitatus tiene el ciclo vital directo típico de los nematodos. El ganado ingiere larvas infecciosas al consumir pastos contaminados. El periodo de prepatencia es de unas 9 semanas. Los gusanos adultos se alimentan de sangre.

Si no está familiarizado con la biología general de los helmintos y de los nematodos parásitos del ganado pulse aquí para consultar el artículo correspondiente en este sitio.


Daño, síntomas y diagnóstico de Mecistocirrus

M. digitatus es capaz de causar pérdidas graves allí donde es endémico, especialmente en animales jóvenes. Es un gusano chupador de sangre que daña la mucosa estomacal para acceder a los vasos sanguíneos.

Los síntomas clínicos son similares a los provocados por Haemonchus. Los síntomas de una infección aguda incluyen hemorragia anémica, heces oscuras y edemas abdominal, torácico y submandibular (“mandíbula de botella”). Puede darse muerte súbita tras ejercicio. Las infecciones crónicas presentan anemia por deficiencia férrica, falta de apetito, adelgazamiento progresivo y pérdida de peso.

El diagnóstico debe confirmarse tras identificación de huevos en las heces.


Prevención y control de infecciones de Mecistocirrus

Las medidas preventivas y de control con productos antihelmínticos son las mismas que para Haemonchus y otros nematodos gastrointestinales. Los benzimidazoles, el levamisol y los endectocidas (abamectina, doramectina, ivermectina, moxidectina, etc.) procuran un control de ordinario suficiente.

Estos antihelmínticos están disponibles en varios tipos de formulaciones orales e inyectables. Para saber más sobre sus ventajas e inconvenientes consulte los artículos específicos en este sitio: suspensiones o soluciones para la administración oral o intrarruminal (enlace), inyectables (enlace) o aditivos y premezclas (enlace).

Por ahora no hay vacunas que protejan a los animales domésticos haciéndolos inmunes a Mecistocirrus digitatus. Por ahora no hay tampoco métodos de control biológico de Mecistocirrus digitatus mediante sus enemigos naturales.

En el Menú de MARCAS comerciales (Vademécum) (enlace) de este sitio puede encontrar información sobre numerosos antiparasitarios comercialesen la mayoría de países de América Latina y España, en concreto sobre:

Puede interesarle el artículo en este sitio sobre plantas y remedios vegetales antihelmínticos (enlace).

Consulte a un veterinario o a los servicios zoosanitarios de su región para obtener informaciones y recomendaciones más precisas adaptadas a las condiciones climáticas y ecológicas regionales.

Consulte los artículos sobre las medidas de prevención de infecciones (pulse aquí) y sobre el uso correcto de productos antihelmínticos (pulse aquí) en este sitio.


Resistencia de Mecistocirrus a los antiparasitarios

Por ahora no hay reportes de resistencia de Mecistocirrus a los antihelmínticos de uso habitual.

Esto significa que si un producto no procura la eficacia esperada contra estos parásitos, lo más probable es que no se deba a un problema de resistencia, sino a uso incorrecto o a que el antiparasitario empleado no es adecuado para dicho control. El uso incorrecto es la causa más frecuente del fracaso de productos antiparasitarios.

Aprenda más sobre qué es la resistencia y cómo manejarla.