Oxyuris equi es un gusano redondo (nematodo) queOxyuris equi, gusano adulto. Imagen tomada de www.techniquesdelevage.fr infecta caballos y otros equinos (asnos, mulas, zebras, etc.).

Se da en todo el mundo, pero la prevalencia difiere mucho de un lugar a otro. De ordinario son menos frecuentes que los estrongílidos.

Estos gusanos no afectan a bovinos, ovinos, caprinos, aves, perros o gatos.

La enfermedad causada por Oxyuris equi se denomina oxyuriasis u oxyuriosis

Los caballos infestados con Oxyuris equi ¿son contagiosos para seres humanos? 

  • No, porque estos nematodos que infectan a los caballos y asnos son específicos de esos hospedadores y no infectan a los seres humanos. Enterobius vermicularis, una especie próxima a Oxyuris equi, es parásita de los seres humanos.


Localización de Oxyuris equi

El órgano predilecto de los adultos de Oxyuris equi es el intestino grueso (sobre todo el colon).


Descripción de Oxyuris equi

Las hembras adultas de Oxyuris equi alcanzan unos 150 mm de longitud, con una parte trasera o cola en forma de punzón de longitud variable. Los machos adultos son mucho menores, sólo de 9 a 12 mm. Típico de esta especie es la parte posterior en forma de punzón o alfiler. Son de color blanquecino. Como en otros nematodos, el cuerpo está cubierto de una cutícula flexible pero bastante resistente.

Los gusanos tienen un tubo digestivo con dos aberturas. También tienen un sistema nervioso pero carecen de órganos excretores y de sistema circulatorio, es decir, no tienen ni corazón ni vasos sanguíneos. Los machos tienen una bolsa copulatriz con una sola espícula bastante larga para fijarse a la hembra durante la cópula.

Los huevos son ovoides y alargados, de unas 40x90 micras, ligeramente aplanados de una parte. Tienen una cubierta gruesa y un opérculo en uno de los polos. Los huevos infectivos contienen casi siempre una larva, a menudo enrollada.


Ciclo vital de Oxyuris equi

Huevo de Oxyuris equi. Imagen tomada de www3.vetagro-sup.fr

Oxyuris equi tiene un ciclo vital directo, es decir, no intervienen hospedadores intermediarios. Las hembras adultas en el intestino grueso se desplazan hacia el recto, y su extremo posterior asoma por el ano, donde ponen huevos en la región perianal. Los huevos van cubiertos de un líquido pegajoso de color blanquecino, amarillento o verdoso. Este líquido con los huevos permanece adherido a la piel del caballo durante varios días.

Dentro de los huevos se desarrollan las larvas infectivas en 5 a 7 días. Como las masas de huevos son irritantes para el hospedador, éste reacciona lamiéndose o rascándose las partes afectadas. De este modo ingiere los huevos infectivos. O bien las masas de huevos se secan y caen al suelo, contaminando el entorno, el forraje o el agua, facilitando que los ingieran otros caballos. Los huevos infectivos sobreviven de 8 a 10 semanas en el entorno.

Los huevos ingeridos eclosionan en el intestino delgado liberando las larvas L3 que penetran en la mucosa intestinal. Aproximadamente una semana después mudan a larvas L4 que se desplazan hasta el colon ventral y se prendan de la mucosa. Unos dos meses después completan su desarrollo a adultos. La madurez sexual la alcanzan unos 3-a meses más tarde. 

El periodo de prepatencia tiempo entre la infección y la expulsión de los primeros huevos) es de 4 a 6 meses, aunque hay reportes que sugieren que puede ser más breve basados en la observación de que potrillos de 3,5 meses ya mostraban masas de huevos en la región perianal.

Si no está familiarizado con la biología general de los helmintos y de los nematodos parásitos del ganado pulse aquí para consultar los artículos correspondientes en este sitio.


Daño, síntomas y diagnóstico de Oxyuris equi

Como regla general, caballos jóvenes tienden a sufrir más de infecciones de Oxyuris equi que animales adultos. Esto se debe probablemente a que los adultos expuestos a infecciones acaban desarrollando inmunidad adquirida. De todos modos, las infecciones de Oxyuris equi no son muy dañinas. Las larvas prendidas de la mucosa intestinal pueden dañarla y causar cólico.

El daño mayor parece ser el causado por el intenso picor que provocan las masas de huevos en la región perianal. Los caballos afectados se rascan vigorosamente contra objetos, a menudo durante la noche. A menudo muestran caída de pelo y pelo deslucido. También peden producirse heridas que pueden contagiarse con bacterias secundarias o atraer moscas causantes de miasis.

El diagnóstico se basa en la detección de las masas de huevos característicos en la región perianal. Puede tomarse una muestra con cinta adhesiva para examinarlos bajo el microscopio. Estas muestras pueden ser también positivas incluso si no se ven masas de huevos macroscópicas. Recuentos de huevos fecales son de ordinario negativos debido a la característica oviposición de la especie. Ocasionalmente se encuentran gusanos muertos en las heces, o se pueden observar gusanos vivos asomando por el ano para desovar.


Prevención y control de Oxyuris equi

Prevención y control no químicos

Lavar a conciencia la región perianal con agua y un detergente suave, no irritante elimina las masas de huevos y contribuye a reducir las infestaciones. Se recomiendan también medidas higiénicas al interior de establos y cuadras, tales como eliminar el estiércol o cambiar la cama con frecuencia, particularmente en ranchos equinos o allí donde se congregan numerosos potros, especialmente si tienen un historial de infecciones con Oxyuris equi. Puede considerarse el tratamiento de los establos e instalaciones con vapor caliente a presión, pero no suele ser suficiente para eliminar las infestaciones.

Para consultar otras medidas preventivas contra nematodos gastrointestinales pulse aquí. 

Por ahora no hay vacunas que protejan a los caballos haciéndoles inmunes a Oxyuris equi.

Por ahora no hay tampoco métodos de control biológico de Oxyuris equi mediante sus enemigos naturales.

Pulse aquí si está interesado en plantas medicinales para controlar los parásitos internos del ganado, caballos y mascotas.

Prevención y control químicos

Hay numerosos antihelmínticos de amplio espectro eficaces contra los adultos y las larvas de Oxyuris equi, p.ej. benzimidazoles (febantel, fenbendazol, mebendazol, oxfendazol, etc.) y endectocidas (lactonas macrocíclicas; sobre todo ivermectina y moxidectina). Pero no todos son eficaces contra los estadios inmaduros. Lea atentamente la etiqueta del producto para aclararlo. La mayoría de estos antiparasitarios son también eficaces contra otros gusanos parásitos de los caballos que suelen darse junto con Oxyuris equi. Otros antihelmínticos de espectro estrecho de acción como las tetrahidropirimidinas (pirantel, morantel) también son eficaces contra los adultos y larvas L4 de Oxyuris equi.

Numerosos antiparasitarios comerciales contienen mezclas de dos o más sustancias activas de clases químicas diferentes. Apuntan a controlar al mismo tiempo nematodos y cestodos (tenias), o a aumentar la probabilidad de que al menos una sustancia activa sea eficaz contra los gusanos ya resistentes a la otra, o para retrasar la aparición de resistencia en poblaciones de gusanos aún susceptibles.

En muchos países, la mayoría de los antihelmínticos equinos están disponibles sólo para administración oral (pastas, geles, suspensiones, aditivos, etc.). Muy pocos de los inyectables tan utilizados en ganado están también autorizados para caballos. Muchos propietarios de caballos se quejan de los elevados precios de las formulaciones equinas de ivermectina (pasta, gel) comparadas con los inyectables del mismo compuesto para bovinos y otro ganado, que no suelen estar autorizadas para caballos, y se preguntan el porqué. La razón por la que estos inyectables no suelen estar autorizados para caballos es que poco después de su introducción, hace ya más de 30 años, se vio que los caballos desarrollaban a menudo infecciones graves de clostridios en el lugar de la inyección (debida a la contaminación de las agujas, no a la ivermectina) y otros efectos secundarios que no se daban en bovinos u ovinos. Además, el comportamiento farmacocinético de la ivermectina en caballos es diferente que en rumiantes. Es por ello por lo que se desarrollaron las formulaciones orales (pastas, geles) que no muestran esos efectos secundarios, pero que son mucho más costosas, a menudo por razones comerciales.

La mayoría de los antihelmínticos con benzimidazoles (febantel, fenbendazol, mebendazol, oxfendazol, etc.), tetrahidropirimidinas (pirantel, morantel) y otros antihelmínticos clásicos matan los gusanos tras la administración y se metabolizan o excretan en cuestión de horas o pocos días. Esto significa que tienen sólo un corto efecto residual. Como consecuencia desparasitan los animales tratados, pero no los protegen contra nuevas infecciones. Para asegurar que los animales estén libres de gusanos hay que desparasitarlos periódicamente, en función de las condiciones epidemiológicas y climáticas locales. Los endectocidas (lactonas macrocíclicas; sobre todo ivermectina y moxidectina) son una excepción porque se almacenan temporalmente en la grasa corporal del hospedador de la que se liberan progresivamente. Por ello aseguran varias semanas de protección contra las reinfestaciones, en función de la dosis, la formulación y el parásito concreto.

Consulte a un médico veterinario para obtener informaciones y recomendaciones más precisas adaptadas a las condiciones climáticas y epidemiológicas regionales.


Resistenciade Oxyuris equi a los antiparasitarios

Hay unos pocos reportes (p.ej. en Alemania, Nueva Zelanda, EE.UU.) de adultos de Oxyuris equi que sobrevivieron el tratamiento con endectocidas (lactonas macrocíclicas; sobre todo ivermectina y moxidectina) o pirantel. Pero no está claro si se debió a verdadera resistencia o sólo a una eficacia insuficiente de estos compuestos contra Oxyuris equi a la dosis recomendada. Desde luego no se trata por ahora de un problema firme y extendido.

Esto significa que si un antihelmíntico no procura el control esperado de Oxyuris equi, lo más probable es que no se deba a un problema de resistencia, sino a uso incorrecto o a que el producto era inadecuado para ese uso. El uso incorrecto es la causa más frecuente del fracaso de los antiparasitarios.

Aprenda más sobre qué es la resistencia y cómo manejarla.